Thursday, November 15, 2007

The longest trip (Part 3)

(Continued from here)

We left Buenos Aires at around 10 AM on December 28th. Normally, we would take Highway 29, which even though is a one lane highway (similar to our back roads), it was almost deserted, and our trip would be about 70 km shorter. Since we were driving an old car, that would have made our trip one hour shorter; but we had to take Highway 2 instead, which is the highway with the most traffic in the whole country, especially at that time of the year. You see, we had to make a delivery for a customer, which was 100 Km down that highway. At that time, Gaby and her family had customers that far away from home (and further too) who would order empanadas and pizzas periodically.

The trip to Necochea was uneventful. It was sunny, but not too hot; still, I noticed that my left arm was exposed to the sun, so I asked Gaby to give me a cloth or something so I could cover it. It was only 11:00 AM, but it was too late for my poor arm; it stayed red and swollen for a few days, and if it hadn't been for my grandma's aloe vera plants, I would have been in a lot of pain!

Me and my five brothers
(Sebastián, Paco, me, Juan, Martín and Guillermo)

We had one of those 'the whole family' kind of parties for New Year's Eve, because my brother (who lives in US) was visiting us; the good thing was that by then Gaby knew most of my family, so I didn't have to go through those introductions in which I'm trying to figure out what my relationship with the people I was introducing really was.
The weather was great, so we went to the beach, but also fishing (we love fishing!). Gaby was 5 months pregnant, so her belly was almost as big as mine at that time (...), but she was feeling great, so we could do almost everything we wanted.

A couple days after New Year's, we packed and got ready to go back to Buenos Aires. I remember my Dad was taking pictures of us as we were getting ready to turn on the car and go. I turned the key... and it got stuck. The car got started, but the ignition was still working, and soon we started to see smoke coming out of the engine. We panicked; we couldn't turn off the car, so I opened the hood and my brother yanked the cables that feed the battery (and burned his hand in the process). Once we took some time to catch a breath, we realized that the key was still locked, and it actually got broken. This meant that we had to fix it, so we had to stay in Necochea for one more day (and got slightly poorer as well).

We finally left at 10:00 AM on Tuesday, January 3rd. As I said before, the car was old, so we weren't going too fast (I believe the fastest we got was about 90 km/h). The first two hours were scary, as we crossed paths with a lot of trucks in Highway 88, that runs between Necochea and Mar del Plata. Every time we passed one, our car would shake. A few hours later, we blew a tire in the middle of a curve; two things played in our favour: 1) I was going slow and 2) It happened just in front of a small town that had a mechanic! They fixed our tire and we resumed this accidented trip.

We stopped again to pick up some plastic bins at Gaby's customer, and by that time it was almost midnight! We still had a good hour and a half or two to go...now that was a long trip. I arrived to a point in which Highway 2 meets Highway 215, 50 Km before arriving to Buenos Aires. I asked Gaby "Do you want to stay on Highway 2, or should we take the 215 so we go around BA instead of through it?" Gaby was very nervous and replied "I don't know, I just want to arrive home". Against all logic, I decided to stay on Highway 2.

Just ten minutes later, at 1:15 AM, I arrived to another cross, this time where Highway 36 begins. This is a dangerous place, so I instinctively slowed down to 70 km/h. As I was about to go past it, a truck coming from the other side turned left, without even stopping (or seeing me). I hit the brakes as hard as I could, held Gaby (who was asleep) and swerved to my right, all at the same time. But it was too late, and we hit the truck almost at the same speed we were coming.


This is the exact place where we had our accident

(Continued)


(Continúa de aquí)

Salimos de Buenos Aires a las 10 AM del December 28th. Normalmente, íbamos por la ruta 29, que a pesar de ser de un solo carril (como los 'back roads' de aquí), estaba casi desierta, y nuestro viaje se hacía unos 70 km más corto. Como manejábamos un auto viejo, esto habría hecho que nuestro viaje fuera una hora más corto; pero tuvimos que tomar la ruta 2, que es la de mayor tráfico del país, especialmente en esa época del año. La razón era que teníamos que entregar un pedido a un cliente que estaba a 100 km por esa autopista. En esa época Gaby y su familia tenían clientes tan lejos (y aún más) que pedían empanadas y pizzas regularmente.

El camino a Necochea no trajo problemas. Estaba soleado, pero no muy caluroso; de todos modos noté que mi brazo izquierdo estaba expuesto al sol, así que le pedí a Gaby que me pasara un trapo o algo así para cubrirlo. Era sólo las 11:00 AM, pero ya era demasiado tarde para mi pobre brazo; lo tuve rojo e hinchado por unos días, y si no hubiese sido por las plantas de aloe vera de mi abuela, la habría pasado bastante mal!

Tuvimos una de esas fiestas de Fin de Año en la que se reúne 'toda la familia', porque mi hermano (que vive en EEUU) nos estaba visitando; lo bueno es que para entonces Gaby ya conocía a casi toda mi familia, así que no tuve que sufrir presentándole gente mientras trataba de figurarme cuál era mi parentesco real con ellos.

El clima fue buenísimo, así que fuimos a la playa, pero también a pescar (cosa que nos encanta). Gaby tenía cinco meses de embarazo, así que su barriga era casi tan grande como la mía (...), pero se sentía fantásticamente, así que hicimos todo lo que quisimos.

Gaby and me at the beach, on our last day in Necochea

Un par de días luego de Año Nuevo, empacamos y nos preparamos para volver a Buenos Aires. Recuerdo que mi padre nos sacaba fotos mientras nos aprestábamos a arrancar el auto para salir. Giré la llave... y se quedó trabada. El auto arrancó, pero el arranque aún estaba encendido, así que pronto empezamos a ver humo saliendo del motor. Nos asustamos; no podíamos apagar el auto, así que abrí el frente y mi hermano tiró de los cables de la batería (quemándose sus manos en el proceso). Una vez que tuvimos tiempo de respirar, nos dimos cuenta de que la llave seguía trabada, y se había roto. Esto significó quedarnos un día mas en Necochea, porque hubo que arreglar el auto (lo que nos dejó un poco más pobres).

Finalmente, salimos a las 10:00 AM del martes 3 de Enero. Como dije antes, el auto era viejo, así que no íbamos muy rápido (calculo que lo más rápido que fui habrá sido 90 km/h). Las primeras dos horas fueron terroríficas, nos cruzamos con muchos camiones enormes en la ruta 88, que comunica Necochea y Mar del Plata. Cada vez que pasábamos alguno, nuestro auto se sacudía. Unas horas más tarde, reventamos un neumático en el medio de una curva; dos cosas jugaron en nuestro favor: 1) estaba yendo despacio y 2) justo nos pasó en frente de un paraje que tenía un taller mecánico y gomería! Nos arreglaron el neumático y resumimos este viaje tan accidentado.

Volvimos a parar, esta vez para recoger unos cajones de plástico que habíamos dejado en lo del cliente de Gaby, y para este momento ya era casi la medianoche! Todavía nos quedaban de una hora y media a dos para llegar... éste sí que era un viaje largo. Arribamos al cruce de la Autovía 2 con la ruta 215, a 50 km de Buenos Aires. Le pregunté a Gaby "Querés que siga en la ruta 2, o agarro la 215 así vamos alrededor de Buenos Aires en lugar de cruzarla toda?". Gaby estaba ya muy nerviosa y me contestó "No sé, todo lo que quiero es llegar a casa". Contra toda lógica, decidí que siguiéramos por la ruta 2.

Sólo diez minutos más tarde, a la 1:15 AM, arribamos a otro cruce, esta vez el de donde empieza la ruta 36. Como es un cruce peligroso, bajé instintivamente la velocidad a unos 70 km/h. Cuando estaba ya pasando el cruce, un camión que venía en la dirección opuesta dobló a su izquierda para tomar la ruta 36, prácticamente sin frenar (o vernos a nosotros). Pisé los frenos lo más fuerte que pude, agarré del brazo a Gaby (que dormía) y tiré un volantazo hacia la derecha, todo al mismo tiempo. Pero fue muy tarde, y chocamos de frente contra el camión casi a la misma velocidad a la que veníamos.

(Continuará)

9 comments:

  1. ¿Que paso despues? quiero saber mas, cuente cuente. Esta historia me atrapa. Que anden bien.

    ReplyDelete
  2. En su momento, Stephen King fue el primero en sacar una novela online The Plant, por qué no un argentino puede sacar un libro, a partir de lo escrito en su blog, porque esto ya se está convirtiendo en una "bloggrafía".
    Como siempre, muy bien contada.

    ReplyDelete
  3. Adhiero a las palabras de Alfonso. En una de esas, es best seller.
    Depués compartes con nosotros las ganancias de las ventas ...jejeje.
    Aparte de las bromas, agradecer, a Dios, o al destino, que estén contando esta historia.

    ReplyDelete
  4. Jorge, Alfonso:
    Lo único que tengo en común con Stephen King es que estuve en Bangor, Maine allá por 1998 (ahí es donde vive). Un poquito exagerado el asunto, eh.

    Me encantó la palabra 'bloggrafía', no la conocía. Y como dice Jorge, sí, hay que agradecer a Dios que estemos vivos. En el post de hoy voy a enumerar todos las cosas que se combinaron para que aún estemos por aquí.

    ReplyDelete
  5. Natalia, gracias por el comentario. También estoy trabajando en un PDF con toda la historia de mi primer año en Canadá (fueron 12 capítulos que escribí aquí el mes pasado).

    Evidentemente, en estas historias pasa más en cada episodio que en los capítulos de "Andrea Celeste" o "Amo y Señor"... :-)

    ReplyDelete
  6. Hola Gabriel,

    la palabra "bloggrafía", se me ocurrió, juntando obviamente blog+biografía, después la busqué en google y hay algunas ocurrencias, no soy tan original ;(

    Obviamente que hay distancias con SK, pero también hay similitudes en la narrativa, en un cierto "discurso interior" que atraviesa los relatos, más allá del accidente, o de los "accidentes" que viviste en tu llegada a Canadá, están las pequeñas cosas muy bien contadas, con un "aire" muy sereno.

    ReplyDelete
  7. Alfonso, hice el mismo ejercicio que vos y también me había ido a buscar a Google.

    Me parece una palabra muy ingeniosa, y como yo no la conocía tampoco, creo que fue original, al menos para mí.

    Te agradezco nuevamente los cumplidos a mi escritura. Esto me está entusiasmando mucho.

    ReplyDelete
  8. Hola Gabriel.
    Me enganchaste completamente desde el inicio de tus relatos. Debo confesar que hasta he derramado una que otra lágrima por ahí.
    Gracias por tu visita. Y si, efectivamente estoy suscrita a tu blog, todos los días leo tus entradas y soy igual de adicta a livewaterloo que a los Ziegler. ;)
    Nos seguimos leyendo. Un abrazo desde México.

    ReplyDelete
  9. Gabriel,
    Sos un turro.
    Nos tenes en el borrrrrrde del asiento cada vez que escribis en partes (como cuando escribiste tu historia de los comienzos).
    Felicitaciones!!!!!!!

    (Y SEGUI PORRRR FAVOOOOORRR!!!!)

    ReplyDelete

Please leave a message after the beep

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...

Buy at KW Empanadas!

Share |